Últimamente los lápices de colores personalizados de Oficio han ido de comunión.
Macarena Gea me encargó un par de cajas de lápices para la comunión de Alejandro, el primer trabajo de su proyecto Bodas y algo más.
Y Clara y Susana, de Dulce Sobremesa, también contaron con los lápices de Oficio para la comunión de Raúl. En esta ocasión, cada niño invitado se llevaba a casa un par de lápices. Había lápices de 18 colores distintos, y los pares se hicieron al tun-tun. Por lo que me cuentan, los niños estuvieron un buen rato distraídos intercambiándose los colores hasta conseguir los que más les gustaban a cada uno.
P.D.: Como veis, en esta ocasión, las fotos no son mías.
Macarena Gea me encargó un par de cajas de lápices para la comunión de Alejandro, el primer trabajo de su proyecto Bodas y algo más.
Y Clara y Susana, de Dulce Sobremesa, también contaron con los lápices de Oficio para la comunión de Raúl. En esta ocasión, cada niño invitado se llevaba a casa un par de lápices. Había lápices de 18 colores distintos, y los pares se hicieron al tun-tun. Por lo que me cuentan, los niños estuvieron un buen rato distraídos intercambiándose los colores hasta conseguir los que más les gustaban a cada uno.
P.D.: Como veis, en esta ocasión, las fotos no son mías.